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Como todo tratamiento o procedimiento dental, esto puede provocar efectos secundarios.
Conservar trozos de metal y níquel en la boca por un amplio periodo de tiempo acarrea empeoramientos a la salud. Tener una dentadura perfectamente alineado y saludable puede simbolizar un peligro mortífero. No puedes imaginarte lo nocivo que estos metales adheridos a la dentadura te pueden provocar.
La facultad odontológica de la Universidad de Buenos Aires, dio a conocer de un caso que arribó al hospital general de la provincia de la ciudad, en el que un enfermo de 31 años mostró un rar osteosarcoma, o tumor canceroso que se desarrolla en el hueso, en la mandíbula y en el maxilar.
El hospital advirtió que el tumor que el paciente presentaba fue debido a los metales que tenía en sus dientes.
Una vez que la facultad odontológica de esta universidad atrajo el suceso para poder estudiarlo, observaron que había una alteración en la dentadura, dientes móviles o flojos, y el paciente informaba de un dolor insoportable cuando mascaba. El cáncer desgraciadamente había hecho metástasis y se había difundido por toda la boca.
La presencia de una fuerte cantidad de níquel, flúor, metal, y metaloides en el tumor, fue lo que llamó la atención de los doctores y los odontólogos, pues estos son los compuestos esenciales de los llamados frenos o brackets.
Durante una entrevista de evaluación, el paciente declaró haber usado brackets durante más de 5 años de su vida…
Esto hizo que los odontólogos profundizaran más acerca de la causa del tumor, y descubrieron que los frenos desprendían una pequeña cantidad de los elementos encontrados en el tumor cada vez que se consumían alimentos de alta acidez. Alimentos como las salsas, café, grasas, frituras, carnes rojas etc…
La conclusión del estudio reveló que el ser portador de brackets por un largo tiempo, y consumir comidas durante el proceso de rectificación dental deriva en un inevitable cáncer de boca.
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