1 taza de harina
3/4 de taza de
azúcar
1 cucharadita de
polvo para hornear
1/2 cucharadita de
sal
4 cucharadas de
mantequilla sin sal derretida
1 huevo
1/2 taza de leche
entera
1 cucharadita de
extracto de vainilla
2 paquetes de
fresa
1 cucharada de
azúcar para la crema batida
1 cucharada de
azúcar glass para la crema batida
1/2 cucharadita de
esencia de vainilla para la crema batida
1 taza de crema
para batir
Preparación
Precaliente el horno a 190 grados.
Engrase un molde de pastel redondo y enharine.
Mezcle el harina con el azúcar, polvo para hornear, y sal
en un recipiente.
Poco a poco agregue la mantequilla, huevo, leche, y
vainilla hasta que se vea una mezcla suave e incorporada.
Ponga la mezcla en el molde redondo engrasado y meta al
horno por 25 minutos o hasta que un palillo insertado salga limpio.
Deje enfriar por 10 minutos sobre una rejilla y desmolde.
Seleccione las mejores fresas (para la parte de arriba) y
reserve.
Pique el resto de las fresas y ponga en un recipiente
junto con 1 cucharada de azúcar normal.
Bata la crema con el azúcar glass y la vainilla hasta que
se formen picos. Refrigere hasta que se vaya a usar.
Rebane horizontalmente el pastel, creando dos capas de
pastel.
Ponga los jugos de las fresas picadas sobre las dos
mitades.
Tome la mitad de la crema batida e incorpore con las
fresas picadas.
Ponga una capa de pastel sobre un platón y cubra con la
crema con fresas picadas.
Coloque la otra capa de pastel encima y cubra con el
resto de la crema batida.
Decore con las fresas reservadas y sirva.